Futbol Sala

Fútbol en estado puro dentro de un recinto cerrado y sobre pista dura. Es la manera de unir la potencia y colocación del Balonmano, la estrategia y tácticas del Baloncesto, la velocidad del ping-pong… Es decir Fútbol en su máxima expresión.

Los jugadores de este deporte tienen que estar hechos de una pasta especial, tienen que exprimirse al máximo durante el tiempo que están en el parquet porque aquí no vale bajar los brazos y esperar que el que esta atrás te cubra la espalda, aquí o estas o no estás. Hay que presionar la salida del balón y bajar para colocarse en defensa y una vez hecho ese trabajo hay que volver al ataque y posicionarse para descolocar al equipo rival y después otra vez a empezar, prácticamente sin tregua.

Todos hemos practicado alguna vez el fútbol sala o futbito como nosotros lo llamábamos de pequeño. Daba igual de que jugaras, bueno, como siempre el más malo se ponía de portero y por lo que sé, eso no ha cambiado, pero eso sí,  estabas a tope todo el rato y luego a ducharte y comentar las jugadas.

Conforme van pasando los años sigues haciendo lo mismo y, si eres capaz de aguantar el ritmo, puedes tener 50 años y seguir jugando, claro está con gente de tu misma edad y haciendo filigranas, aunque con ciertas licencias, como por ejemplo crearte tus reglas y jugar uno más y jugar con más tranquilidad, etc… El caso es jugar, hacer deporte y no dejar que te coman los michelines que no son otra cosa que lo que tú te comiste antes.

Somos de lo mejor en este deporte a nivel mundial, tanto en masculino como en femenino, tenemos a los mejores jugadores/as y entrenadores del mundo, y sin embargo son deportes maltratados por los espectadores, que salvo los tres o cuatro equipos punteros que pueden presumir de llenar el pabellón, o de llevar detrás a muchos aficionados, los demás tienen que verse con 500 sino menos en las gradas, y ya es un éxito. Desde luego desde los medios de comunicación no les dan más relevancia que la necesaria y salvo el periódico más leído de este país que nos trae la emoción de este deporte no hay muchas más posibilidades de saber de él.

Tenemos que tragarnos los balones de oro de los endiosados futbolistas del 107x70 que salen en las portadas de los diarios, en la tele, en las revistas, en las estampas y hasta en los cereales del desayuno… Es lo que hay y no hay más, no somos capaces de ver más allá de lo que nos enseñan, por eso somos lo que somos.

Larga vida al fútbol (sala)

Foto web LNFS